Repaso:

 

Publicaciones han salido, publicaciones han partido, otros títulos tomaron su lugar, pero en breve se frenan, desaparecen, para que otras publicaciones salgan, e inconclusas como sus predecesoras, pasen por un cenit y vuelvan a desaparecer... parece que en Perú graficar y abandonar la obra fuera un ciclo de nunca acabar.

 

 

Reales motivos:

 

Las numerosas publicaciones que han salido en nuestro país reflejan fehacientemente el apego peruano por dibujar. Entonces, ¿por qué no se llega a culminar una historia. Los motivos suelen ser los siguientes:

 

  • Empecemos por conocer el punto de vista social que existe hacia quien practica el dibujo. En Perú suele respetarse a quien sabe dibujar, esto por una cuestión, digámosle, de "herencia poblacional", y porque todos desde su infancia hubieran querido poder dibujar a sus personajes favoritos. Sin embargo, una cosa es que te respeten por saber dibujar y otra que toleren la sola idea de que pretendas vivir del dibujo. La misma realidad laboral, así como la todavía persistente idea de que "dibujo" es sinónimo de "niñez", llevan a que los amigos te aconsejen a dejarte de "tonterías", mejor dicho, a que dejes de lado tu talento gráfico y elijas un puesto reconocido como trabajo en nuestra realidad laboral.
  • ¿A qué me refiero con nuestra "realidad laboral"?, a que difícilmente en Perú una empresa gráfica ya constituida apuesta por darle espacio a un dibujante y menos a publicarle un trabajo entero. Para estas empresas, es más fácil reeditar una obra de Bayly; y en ciertos periódicos, más factible llenar el espacio vacío con publicidad promoviendo la prostitución que apoyar a nuestros talentos en dibujo. Para nuestra triste realidad laboral, no caben los creadores ni en ciencias ni en dibujo, sino bastante peón.

 

En resúmen, quien dibuja constantemente, se topa con un entorno que puede tomarle por ocioso y una industria gráfica que menosprecia su talento. ¿Qué puede resultar de esto? que otro artista gráfico guarde la pluma, el lápiz, el borrador, el tajador y la regla en el cajón de los recuerdos y comience a malograr la fina destreza de sus manos ocupado en un trabajo para "varones".

 

 

Posibles soluciones:

 

Las publicaciones que hasta ahora se difunden existen gracias al ímpetu de los mismos dibujantes, que se niegan a si mismo goces con tal de producir sus obras en revistas que usualmente valoran en acequibles 1, 2 y 5 S/. Esto, en vez de contentar, en verdad apena. El precio es bueno, felicito eso, pero el margen de ganancia que les queda es muy bajo y se debe reconocer. Aquí dejo un video para que se den cuenta del enorme trabajo que deben realizar quienes desean hacer Manga o Comic en el Perú (el video pertenece a http://monjeguerrero.com/):

 

 

¿Cómo remediamos esto?, lo ideal sería que empresas gráficas peruanas les dieran la mano, sea donándoles materiales sea ayudándoles a publicar con ganancia compartida. Así el precio se mantiene, pero se gana más al abaratar los costos. Ahora, ya no es pretexto para no apoyar a nuestros dibujantes el decir que no hay eventos donde publicitar el producto. En el actual Perú, donde los amantes de la gráfica se estan cohesionando, no hay mes en que no se realice un evento de Anime/Manga y/o Cartoon/Comic en Lima o provincias. Además, existen focos como los del C.C. Arenales, y potenciales en las ciudades con mayor movimiento comercial. Y ni que decir de los denominados Supermercados que proliferan por todo el país (aunque es una pena que ya ni Vea sea del Perú). Hay pues donde hacer propaganda, solo falta decisión, y es que las promesas gráficas de nuestro país tienen muchísimo por ofrecer.

 

 

Abajo: "Capitán Leo" (Cómic), una de las escasas publicaciones peruanas que salieron con apoyo empresarial.